Antes del parón por la ventana FIBA, Clínica Ponferrada afronta una nueva cita en su pabellón, el Lydia Valentín, desde las 19:30 horas de este sábado. Será una jornada especial como todas en su pabellón, pero esta vez con el añadido de que será una fiesta para el club, que hará la foto de familia con todas las secciones de formación de la entidad presidida por Óscar García. Además, podría debutar Pau Treviño, último fichaje. El rival será el último equipo de este jugador, Ciudad de Huelva Emérita Resources, que llega al Bierzo con varias incógnitas por resolver.
De hecho, aparte de las tres derrotas que ha encadenado en las últimas jornadas, ha cambiado de entrenador e Íñigo Núñez ha sido sustituido por Víctor Pontanilla. Además, varios de sus mejores jugadores, como el mencionado Pau Treviño, Pa Mor Diene, Gaizka Maiza y Mohamed Niang, han salido del club, por lo que poco se parecerá este equipo al que derrotó (77-68) a la escuadra berciana en el Andrés Estrada de la capital onubense en la ida. Además, Rafa García Salamé no participó en la derrota (89-98) sufrida el pasado fin de semana ante La Salud Archena.
El rival: «Un bloque de mucha calidad»
Mantiene, eso sí, a dos de sus mejores jugadores, Soulemane Chabi Yo y Michael Mays, y ha incorporado a Raúl Timoner, base con experiencia reciente en Primera FEB con Hestia Menorca; al exterior Pablo Ávalos, con formación en Estados Unidos; y al pívot serbio Luka Paunov. En definitiva, el entrenador del Clínica Ponferrada, Oriol Pozo, tiene claro que el choque «va a ser complicado. Vendrán con jugadores de primer nivel para la categoría», argumentó el técnico catalán, que añadió que el andaluz es «un bloque de mucha calidad».
En este sentido, Pozo anunció que «estamos viendo que hay muchos cambios en Huelva, tanto en bajas como en nuevos fichajes. Para los jugadores que jueguen es una gran oportunidad para demostrar», precisó el preparador tarraconense, que agregó que «se ha anunciado que habrá más altas. Desconocemos si van a ser si antes o después de nuestro partido», especificó el adiestrador blanquiazul, que reconoció que «vamos a ciegas. No sabemos qué nos vamos a encontrar», precisó el míster del catalán, que asume que «tendremos que reaccionar sobre la marcha».
Posibilidad de sacar el basket-average
Será un partido importante para la escuadra dirigida por Oriol Pozo, que conseguiría, en caso de ganar, igualar las nueve victorias que acumula la formación onubense e incluso tratará de arrebatarle un basket-average no muy amplio. Se acercaría, además, a la cuarta plaza que ahora ocupa Insolac Caja 87 y con la que están igualados Cultural Leonesa y Melilla Ciudad del Deporte. Asimismo, se alejaría de las posiciones de descenso y de la amenaza del play-out en el que ahora mismo está un Lobe Huesca La Magia que tiene las mismas ocho victorias que la formación berciana.
Eso sí, el cuadro oscense aún debe visitar un Lydia Valentín en el que el conjunto ponferradino se ha mostrado prácticamente inexpugnable durante toda temporada. De hecho, sólo Biele ISB, Cáceres Patrimonio de la Humanidad y Cultural Leonesa han asaltado el recinto de la capital berciana en un tramo de la competición complicado. De los resultados como local de cada equipo parece que dependerá la clasificación final de una Segunda FEB que cada semana depara resultados sorprendentes y en la que el último clasificado ha llegado a derrotar al líder.
«El equipo está compitiendo hasta el último tiro»
En concreto, recordó Pozo que «en esta Liga has visto a Algeciras ir a Cáceres y ganar. No hay equipos que no puedan ganar a otros», recalcó el adiestrador de la escuadra ponferradina, que agregó que «Clavijo va a la cancha de Iraurgi y da la sorpresa. No hay partido fácil», insistió el preparador tarraconense, que hizo hincapié en que «entre el cuarto y el undécimo hay una victoria. Quien piense que será fácil está equivocado», advirtió el entrenador blanquiazul, que reconoció que la derrota en la pista de Zornotza «fue una decepción grande porque el equipo hizo un gran partido».
No obstante, aclaró el técnico catalán que «el equipo está bien, bien de ánimos» y valoró positivamente el nivel de esfuerzo del grupo: «Los días que no estamos ganando el equipo está compitiendo hasta el último tiro. Está en buena línea porque venimos de dos grandes victorias en casa», especificó el preparador tarraconense, que afirmó que «sabemos que la clave es seguir siendo fuertes en casa. Ganar fuera es muy complicado», reconoció Pozo, que informó que «estamos trabajando para ganar esa seguridad en los últimos minutos».