El equipo berciano cae (99-93) en León después de que los tiros libres resucitaran a los locales en el segundo cuarto
La ficha del partido:
Cultural y Deportiva Leonesa, 99 (14+29+31+25): Majok Deng (11), Adrià Domínguez (20) Max Amadasun (9), Eric Van der Heijden (10), Rodrigo Llamas (2) –cinco inicial-; Dylan Hayman (15), Greg McKay (4), Pablo Orenga (-), Álvaro González (3) y Dídac Cebolla (25). –Entrenador: Luis Castillo.
Clínica Ponferrada SDP, 93 (24+25+20+24): David Òrrit (4), Jamie Bergens (24), Pau Treviño (9), Rasmus Blak (9), Riley Hayes (22) –cinco inicial-; David Efambe (4), Sergio Romero (4), Rubén Salas (3), Josep Fermí Cera (9) y Ousman Sima (5). –Entrenador: Oriol Pozo.
Árbitros: Alejandro Pellitero González y Diego Fernández Requejo.
Incidencias: Partido correspondiente a la 6ª jornada del Grupo Oeste de la Segunda FEB celebrado en el Palacio de los Deportes de León.
El Clínica Ponferrada SDP no pudo alargar su racha después de tres triunfos consecutivos y cayó por 99-93 en el derbi provincial frente a la Cultural Leonesa, que resucitó en el segundo cuarto gracias a los tiros libres y se adueñó del partido con su acierto exterior y una energía física y ambiental en muchos momentos excesiva que le permitió dominar el rebote en un encuentro disputado hasta el final.
No obstante, el duelo empezó con una gran puesta en escena de la escuadra berciana, liderada por un Jamie Bergens que hizo mucho daño y culminó desde los 4,60 un parcial de 0-8 que acercó la renta blanquiazul al +10. Se llegó y se rompió esa barrera psicológica con sendos triples de Sergio Romero y Josep Fermí Cera, que aliviaron los problemas de faltas del propio Bergens, que cometió la segunda en este primer cuarto.
También cometió dos personales en pocos minutos David Efambe, lo que obligó a Oriol Pozo, míster del equipo berciano, a recurrir de nuevo a Riley Hayes, que puso el 14-24 al final de estos primeros diez minutos. Dominio absoluto sobre la pista de la escuadra ponferradina, que enlazó dos rachas de 8 tantos sin réplica gracias a las aportaciones de Cera y sobre todo Hayes, que acabó con un doble-doble de 22 puntos y 11 rebotes.
El segundo cuarto hace posible la remontada
Reaccionaron los leoneses al comienzo del segundo asalto con Dídac Cebolla, que acabó firmando un partido superlativo, pero fue ahora David Òrrit quien firmó dos acciones de talento para mantener la ventaja en los dobles dígitos. La incertidumbre llegó con el primer triple de Adrià Domínguez y a pesar de que Pozo respondió con un tiempo muerto que precedió al primer acierto de Bergens desde más allá del arco.
No pudo, sin embargo, mantener la renta el cuadro berciano en guarismos confortables, ya que se vio muy castigado por el bonus en faltas. A base de tiro libres resistieron y volvieron al partido los de Luis Castillo, mientras que los de Oriol Pozo aún pudieron castigar desde lejos, ahora con Rubén Salas. Dylan Hayman puso con su segundo 2+1 casi consecutivo el 43-49 con el que se llegó al descanso.
La resurrección leonesa, avalada con una gran diferencia de tiros libres en el segundo periodo, permitió a los locales voltear el marcador después de que Cebolla hiciera precisamente un pleno desde los 4,60. Hasta tal punto llegó la desigualdad que el banquillo berciano y su entrenador, Oriol Pozo, fueron castigados con sendas técnicas en la misma jugada ante la abismal diferencia de criterio que estaban sufriendo.
Apretando hasta el final
Ahí se inclinó el duelo a favor de los de Luis Castillo, ya que Majok Deng no perdonó ninguna de esas opciones desde los 4,60. Incluso anotó desde lejos antes de que Domínguez pusiera la distancia en la decena. De la mano de Bergens trató de reaccionar el conjunto ponferradino para recuperar opciones antes del cuarto asalto, al que se llegó con un 74-69 tras un tiro libre del neerlandés, que acabó con 24 tantos.
Pareció escaparse el duelo al inicio del último acto, ya que Domínguez anotó tres triples que pusieron la renta leonesa en dobles dígitos. Apenas Pau Treviño contestó desde exterior y otro acierto desde el perímetro, ahora de Deng, fue la puntilla. Acabó igualándose el dato de tiros libres, que estaba muy desequilibrado y había resucitado a los locales, pero no lo aprovecharon los bercianos en una inercia adversa.
Pareció ponerse el partido imposible para los visitantes, aunque trataron de mantenerse con vida con los triples de Rasmus Blak. Sin embargo, el acierto de Cebolla en todo, tanto penetrando como desde el exterior, permitió solventar el intento de remontada blanquiazul. A cuatro estuvo a falta de un minuto tras un rebote ofensivo de Hayes. Sin embargo, la pérdida en el último ataque posibilitó el 99-93 definitivo.